La historia del telescopio cubre el largo proceso de transformación del que ha sido objeto este instrumento óptico, gracias a los descubrimientos en los campos de la óptica y de la física. La evolución del telescopio ha sido de gran ayuda para el desarrollo de la astronomía a lo largo de los siglos.
El diseño de estos telescopios refractores iniciales consistía de un lente objetivo convexo y un ocular cóncavo. Galileo utilizó este diseño al año siguiente. En 1611, Johannes Kepler describió cómo podía elaborarse un telescopio con un objetivo y lente ocular convexo y, para 1655, astrónomos como Christiaan Huygens fabricaban telescopios keplearianos de gran alcance con oculares compuestos, pero extremadamente grandes y difíciles de manejar. Hans Lippershey es la primera persona documentado que solicitó una patente para el dispositivo.
Isaac Newton ha recibido el crédito por haber fabricado el primer telescopio reflector "práctico" en 1688, con un diseño que incorporó un pequeño espejo plano y diagonal para reflejar la luz a un ocular montado en un lado del telescopio. En 1672, Laurent Cassegrain describió el diseño de un reflector con un espejo secundario pequeño y convexo para reflejar la luz a través de un agujero central en el espejo principal.
El diseño de estos telescopios refractores iniciales consistía de un lente objetivo convexo y un ocular cóncavo. Galileo utilizó este diseño al año siguiente. En 1611, Johannes Kepler describió cómo podía elaborarse un telescopio con un objetivo y lente ocular convexo y, para 1655, astrónomos como Christiaan Huygens fabricaban telescopios keplearianos de gran alcance con oculares compuestos, pero extremadamente grandes y difíciles de manejar. Hans Lippershey es la primera persona documentado que solicitó una patente para el dispositivo.
Isaac Newton ha recibido el crédito por haber fabricado el primer telescopio reflector "práctico" en 1688, con un diseño que incorporó un pequeño espejo plano y diagonal para reflejar la luz a un ocular montado en un lado del telescopio. En 1672, Laurent Cassegrain describió el diseño de un reflector con un espejo secundario pequeño y convexo para reflejar la luz a través de un agujero central en el espejo principal.
Existen dos grandes divisiones entre los telescopios, según el tipo de objetivo que utilizan: los reflectores y los refractores. Los reflectores se constituyen de un espejo principal (espejo primario u objetivo), el cual no es plano como los espejos convencionales, sino que fue provisto de cierta curvatura (idealmente parabólica) que le permite concentrar la luz en un punto.
Los telescopios refractores poseen como objetivo una lente (o serie de lentes, la cantidad varía según el diseño y calidad) que de forma análoga al funcionamiento de una lupa, concentran la luz en el plano focal. En astronomía se utilizan ambos tipos de telescopios, cada uno con sus propias ventajas.
ESQUEMA DE LA DIRECCIÓN DE LA LUZ
FUNCIONAMIENTO
FUENTES: